Joe Pass, fue un guitarrista estadounidense de jazz, caracterizado por su uso del walking bass, del contrapunto melódico en medio del curso de una improvisación y de un estilo melódico de acordes, se trata de uno de los más alabados guitarristas del jazz, tanto por la crítica como por sus compañeros de profesión, a algunos de los cuales sirvió de eficiente acompañante en distintos trabajos.
Este genial guitarrista se confesó siempre un ferviente admirador de Django Reinhardt e incluso en sus inicios formó un grupo a imagen y semejanza del Quinteto del Hot Club de Francia al tiempo que se interesaba por el bebop naciente. Sin embargo, no fue hasta principios de los sesenta cuando Joe Pass comenzó a convertirse en la popular figura que llegaría ser, especialmente de la mano del infatigable promotor Norman Granz, quien le transformó en una de las estrellas de la discográfica Pablo y le ofreció la posiblidad de medirse con artistas de la talla de Benny Carter, Milt Jackson o Ella Fitzgerald, con los cuales grabó algunas de sus mejores obras.
Un buen ejemplo del saber hacer de este maravilloso guitarrista lo tenemos en la colección de discos editados por el mencionado sello discográfico con el nombre de “Virtuoso”. Impecable en la ejecución -nítida y pulcra sin por ello caer en la frialdad- e ingenioso en su fraseo, Joe Pass ha sido uno de los más personales guitarristas de las últimas décadas, creándose un estilo propio al margen de las grandes corrientes coetáneas de ese instrumento y estableciéndose como un elegantísimo acompañante que en ningún caso renunció a su propio discurso. Falleció en Los Ángeles, California en 1994.